LAS APARIENCIAS QUE NO ENGAÑAN…A UN DETECTIVE
DETECTIVES PRIVADOS EN GIJÓN
En Máxima Detectives atendemos casos tanto estrictamente particulares como prestamos servicios a empresas u otro tipo de entidades. En el ámbito particular, algunos casos desvelados en nuestro ejercicio como detectives privados en Gijón han puesto de manifiesto las múltiples facetas que presenta la capacidad humana para el engaño. El engaño con fines de no pagar, o pagar menos, se entiende. Una capacidad de simulación especialmente creativa cuando se trata del pago de pensiones acordadas en procesos de separación o divorcio.
Se han llegado a dar casos, nos comenta algún detective privado en Gijón, de personas que han desdeñado realmente importantes oportunidades de mejora de su situación económica, con el exclusivo fin de no tener que pagar más a su ex pareja. Rechazar alguna importante oportunidad laboral o de promoción profesional para evitar cualquier incremento de ingresos que implique una alteración de las medidas económicas acordadas resulta cuanto menos chocante; pero hay gente para todo. Sin embargo, es algo inusual.
La mayoría de las personas que no quieren que una eventual mejora de sus situación económica revierta en la pensión compensatoria, o en cualquier otro tipo de prestación que se encuentren obligados a pagar, suele recurrir al engaño. Camuflar los ingresos de modo que no resulten fáciles de detectar es el expediente más habitual. Realizar actividades profesionales complementarias al trabajo habitual y retribuidas en dinero negro, está a la orden del día. Incluso la firma de contratos laborales simulados una parte de cuyo salario no se declara, para evitar ser detectado como ingreso habitual. En estos últimos casos con la necesaria connivencia del empresario de turno, que de esa forma se ahorra el coste derivado de las cotizaciones sociales adicionales.
Y aquí es donde la actuación del detective privado juega un importante papel. En Gijón o en cualquier otra ciudad española, los defraudadores suelen cometer los mismos errores. Se trata sencillamente de poner sobre la mesa qué está pasando realmente. Quién gana qué y cuánto gana realmente. No es nada fácil, por supuesto. Y estas labores de investigación patrimonial tienen su metodología y llevan su tiempo, especialmente en el ámbito de la modificación de medidas económicas en separaciones y divorcios contenciosos. Demostrar el incremento patrimonial o la mejora de la situación económica, empieza por recopilar datos que demuestren que la persona «ha venido a mejor fortuna» empleando la terminología legal. Pues esta mejora suele revelarse en signos externos apreciables que van desde el cambio de coche, de vivienda o de indumentaria, al cambio de hábitos o gastos extraordinarios como viajes, etc.. Aunque hay personas capaces de disimular estos signos con maestría y ofrecer un modo de vida casi monacal a las miradas indiscretas, el dinero habitualmente busca su cauce , y a veces puede detectarse en incrementos inexplicables de facturación o consumo de determinados servicios, como por ejemplo, el juego o las apuestas online u otro tipo de servicios. Otra cuestión, y no menor, es cómo demostrarlo. Pregúntele a su detective privado…él sabrá la respuesta.