¿TU PAREJA TE ES INFIEL? CÓMO AVERIGUARLO
DETECTIVES PRIVADOS EN GIJÓN
Nos informan del incremento de investigaciones dirigidas a demostrar infidelidades. Al igual que la controvertida recuperación económica parece estar contribuyendo a un repunte en las menguantes estadísticas de separaciones y divorcios acordados judicialmente, las mismas causas económicas parecerían justificar que muchas personas que antes preferían mirar hacia otro lado, ahora se decidan a confirmar (o desmentir ) las sospechas de infidelidad de su pareja contratando los servicios de un investigador privado. Al menos eso es lo que nos confirman numerosos detectives privados en Gijón que vienen constatando un aumento sostenido de este tipo de casos en los últimos tiempos.
Lógicamente, antes de recurrir a un detective privado, ha surgido la sospecha. Pues cuando se contrata a un profesional de la investigación, generalmente se busca una confirmación o una prueba irrefutable de lo que ya se intuye. La finalidad es obtener pruebas concluyentes, que acaben con la incertidumbre y que eviten agravar la situación con desmentidos o explicaciones poco creíbles.
Resolver dudas sobre infidelidades es labor de los detectives privados, pero hay veces en que las evidencias no precisan confirmación. Pero, si tu pareja te es infiel ¿cómo averiguarlo? Desde luego, el acceso a la intimidad de la otra persona favorece la obtención de todo tipo de información, incluyendo indicios de que aquella está siendo infiel. En realidad, el potencialmente engañado o engañada tiene una posición privilegiada, mucho más incluso que el detective privado. Sin embargo suele ser éste quien aporte la prueba definitiva.
En Máxima Detectives no somos partidarios de alimentar comportamientos poco edificantes, como la desconfianza mutua o los celos patológicos, o fomentar las sospechas infundadas, pero sí somos conscientes de que los casos de infidelidad encubierta se dan. Y su encubrimiento, a veces constituye todo un arte.
Sin embargo, las huellas de la infidelidad, especialmente si es sostenida en el tiempo, pueden ser rastreadas, por una pareja suficientemente perspicaz. A título meramente ejemplificativo, éstos son algunos de los rastros que podría dejar alguien que esté jugando la baza del doble juego sentimental:
- – Rastros en el móvil. Es la primera causa de descubrimiento y revelación de infidelidades. Si bien nuestra constitución y nuestras leyes garantizan el secreto de las comunicaciones, en un ámbito privado como es la pareja el acceso al móvil del otro puede tener una protección más laxa, tolerada o no por el interesado. El hecho de disponer de varios móviles puede favorecer las tentaciones de utilizar alguno de ellos para fines, digamos, clandestinos.
- – Cambio de rutinas. Las nuevas rutinas o cambios inopinados de horarios pueden ser indicativo de actividades que se quieren ocultar. Las reuniones o viajes de trabajo pueden muchas veces verificarse, o por lo menos intentar contrastar su veracidad con compañeros de trabajo o conocidos.
- – Papeles en los bolsillos. Algo tan inocente como vaciar los bolsillos para hacer la colada o enviar una prenda a la tintorería puede ser fuente de sorpresas desagradables, como un ticket de hotel o la factura de un restaurante con la que no contábamos.
- – Gastos sin justificación. Revisar los extractos bancarios que llegan en papel al domicilio o vía online si tenemos acceso a ellos, también pueden ser reveladores de gastos de difícil justificación por parte del otro miembro de la pareja.
- – Exceso de kilómetros. Fijarse en el cuentakilómetros del coche y compararlo con las distancias que se deberían haberse recorrido en los desplazamiento que se reonoce haber realizado , puede hacer saltar las alarmas.
Desde Máxima Detectives en Gijón se han podido confirmar sospechas de infidelidad a partir de indicios semejantes. En otras ocasiones, sin embargo, no había nada que descubrir. Lejos de despertar inquietudes o motivar desavenencias gratuitas, sabemos que en toda situación de equilibrio, debe primar el respeto mutuo, la sinceridad y la honestidad de comportamiento. Lamentablemente, algunas veces no es así, y es entonces cuando una investigación discreta y efectiva puede acabar aportando la tranquilidad perdida.