¿ES LÍCITO ESPIAR A MIS EMPLEADOS?
Empresarios desconfiados o empleados aprovechados
Como agencia de detectives privados en Oviedo en Máxima Detectives hemos tenido que enfrentarnos a investigaciones en el ámbito laboral. Además de las bajas fingidas, existe otro campo muy habitual, y no es el del espionaje industrial, al que ya nos hemos referido en alguna otra ocasión.
Nos referimos al clásico supuesto del empleado que «mete la mano en la caja». Y por extensión, a todas las variedades de hurtos o sustracción de dinero o efectos por parte de los trabajadores de una empresa, ya se trate en sus propias instalaciones o cuando prestan servicios en lugares ajenos bien en domicilios o en las instalaciones de otra empresa cuando actúan como subcontratas.
Supervisar no es lo mismo que espiar
Es cierto que dentro del llamado «poder de dirección» del empresario, la ley le faculta a ejercer ciertas facultades de supervisión sobre el trabajo realizados por los trabajadores y la manera en que este se realiza. Sin embargo, la intimidad personal, aunque sujeta a modulaciones constituye un derecho fundamental que no puede ser simplemente obviado en el ámbito laboral. Si bien no opera como un derecho absoluto.
Desde los casos del derecho a registrar las taquillas puestas a disposición de los trabajadores por el empresario o a la posibilidad de examinar los correos electronicos enviados desde las cuentas corporativas de la empresa, existe una casuística que en cada caso se han ido encargando de delimitar los tribunales. Siempre preservando la integridad del derecho a la intimidad como núcleo esencial a respetar, pero admitiendo algunas intervenciones en el mismo.
Cómo puede ayudarnos un detective privado
Desde el punto de vista del investigador privado, debemos ser muy conscientes de lo que son barreras infranqueables. Las garantías de los ciudadanos que constituyen los límites al ejercicio de la profesión de detective privado. Desde el punto de vista del empresario, hay que tener en cuenta que grabar imágenes de sus empleados constituye un tratamiento de sus datos de carácter personal y deberá cumplir con los requerimientos del nuevo Reglamento de Protección de Datos.
En lo que se refiere a la actuación de los detectives privados, sin embargo, el empleo de cámaras ocultas encuentra amparo judicial a partir de la sentencia del Tribunal Supremo de 2018, en el caso de un empleado que llegó a hurtar en sucesivas acciones casi 140.000 € de la caja del establecimiento en el que trabajaba, si bien el alto tribunal exigía para su legitimación la concurrencia de los principios de razonabilidad, necesidad, idoneidad y proporcionalidad. Es decir, con un carácter netamente restrictivo, pero no impeditivo.
Desde Máxima detectives privados en Oviedo no dejamos de insistir en que la legalidad de los métodos empleados es la mejor garantía para obtener los resultados deseados. Pues cualquier tipo de prueba obtenida por medios irregulares jamás será validada por un juez en caso de controversia.